martes, 31 de marzo de 2020

Bizcocho de Nata de la Abuela


Diario del confinamiento, segunda quincena. ¿Cómo lo lleváis? Por aquí vamos aguantando, salgo a comprar una vez por semana, compro lo esencial y me vuelvo rapidito a casa. Sin entretenerme con nada. Y con la que está cayendo, sigo viendo mucha gente "de paseo por la calle", no me lo explico, de verdad. Pero bueno, dejando mis lamentaciones a un lado, hoy os traigo un bizcocho para esos cafés mañaneros, un bizcocho que evoca recuerdos, que te transporta a esas épocas olvidadas de pantalón corto y coletas. Sabe a pueblo, a cocina de carbón y noches junto al brasero en la mesa camilla de la abuela. De verdad, es impresionante lo rico que está, la masa cruda y es de pecado, pero cocinado... Bueno, ya me diréis si son imaginaciones mías o, como yo digo, te hace retroceder a esa infancia olvidada por todos y a la que tanto deseamos volver a veces!


martes, 24 de marzo de 2020

Black Vinager Chicken (Pollo Glaseado con Vinagre Negro)


Después de una semana y media de aislamiento ¡por aquí seguimos! Ayer tuve uno de esos días raros. No es que pase nada explícitamente, pero los ánimos andaban un poco por los suelos. A veces, cuando me asomo al balcón y me pongo a observar el ir y venir de la gente, me entra una impotencia y enfado a la vez que creo que no es normal. En mi familia estamos todos en casa, portándonos bien. Desde que comenzó todo esto he bajado a comprar un día y porque tenía que ir a la farmacia a por la medicación de la alergia, que se me había agotado. Sin embargo, cuando te asomas, en la calle hay bastante más gente de la que resultaría recomendable. Sigo sin entender la gente que baja de paseo a comprar el pan, o dos plátanos a la frutería de enfrente. O los que utilizan al perro como excusa para estarse una hora en la calle. He visto posts de Facebook defendiendo este tipo de actividades. Y mira, no. Tengo animales, para mi son uno más en la familia y son mi vida. Ahora tengo gatos pero también he tenido perros. Y se como funciona. No necesitas una hora para que tu perrillo haga sus cositas. En fin... La guinda que colmó el vaso, fue el domingo, a mi vecino del piso de arriba, una pareja de pre-jubilados (no son abuelitos, pero tampoco son jóvenes) no se les ocurre otra que organizar una comilona familiar con invitados y un montón de niños ¿Cómo? ¿En serio? A veces, llamadme mala persona, pero se me pasa por la cabeza desearles que el destino les de un buen susto. Porque encima él, ¡tiene problemas respiratorios!
En fin, perdonad este desatasco, a veces es imposible no reprimirse.
A lo que iba, la receta de hoy. Es una receta sencilla, con muy poquitos ingredientes y que pienso que para estos momentos de finiquitar despensas puede ser apropiada. Es un pollo de esos asiáticos que se preparan en 10 minutos (literalmente)  y están absolutamente deliciosos. Un poco en la línea del Pollo glaseado con Miso y Miel, pero aún más sencillo. Es un pollo glaseado con vinagre negro. ¿Y eso qué es? me preguntaréis... El vinagre negro es un vinagre típico del sur de China envejecido para que adquiera matices malteados y ligéramente ahumados. Es de arroz y, a veces, sorgo. Y ya os estaréis echando las manos a la cabeza porque os estoy enseñando "otra vez" una receta con ingredientes raros y difíciles de conseguir, pero no os asustéis... su sustituto es muy facilón de encontrar y hoy en día prácticamente todo el mundo lo tiene en su casa!


miércoles, 18 de marzo de 2020

Cachapas Venezolanas


Seguimos con el confinamiento, día 6. Hoy me ha parecido interesante recuperar una receta muy, muy viejecita del blog. Las cachapas. Creo que para esta época en la que llegue un momento en que, por no salir a comprar, en la despensa vayan quedando pocas cosas, es interesante. ¿Quién no tiene en el armario una lata perdida de maíz dulce, un poco de harina y un huevo? Sí, así de simple!
La cachapa es un plato típico de Venezuela y Colombia. Probablemente de orígen indígena, no hay datos concretos. Tradicionalmente se cocinaba en planchas metálicas sobre el fuego, aunque en la sartén de casa salen de rechupete!
Por su sabor suave se pueden comer a cualquier hora del día, aunque yo suelo hacerlas por la noche, como una cena rápida acompañadas de algo de ensalada. En vez de la clásica tortilla a la francesa, es una forma de darle originalidad a nuestras cenas, ¿a qué sí? Probarlas y ya me diréis, yo soy una enamorada de este platillo!
Para los peques es muy interesante, más nutritiva que una tortilla y su sabor, ligeramente dulce, las hace deliciosas!


lunes, 16 de marzo de 2020

Cochinita Pibil


Quién nos iba a decir a nosotros hace un año que una pandemia como el coronavirus asolaría el mundo y nos dejaría unos días confinados en casa para contener el contagio. La verdad es que, si lo analizas fríamente, es como el argumento de una película de serie B. Sobretodo por la falta de empatía de la gente, asolando los supermercado como si estuviéramos en guerra. Un poquito de sentido común, por favor. El mundo no se acaba mañana ni los camiones van a dejar de reponer los supermercados.
Así que en este tercer día de confinamiento os traigo una receta que hace mucho tiempo quería subir al blog, pues es un básico en mi casa. La famosa cochinita pibil mexicana. Pero no había manera de hacer la cuadratura del círculo para sacar unas fotos decentes con buena luz y la idea se iba retrasando. Hasta que ya, la semana pasada, me organicé y pude sacar unas fotos decentes.
Esta es mi receta estrella para cuando viene mucha gente a casa y hay que darles de cenar. Organizamos cena mexicana. Unas tortillas de trigo o maíz, la cochinita, un buen guacamole (tenéis una receta infalible en el blog) y la cebolla encurtida. Añadimos un poco de lechuga picada, un poco de pico de gallo, salsas picantes y algo de queso rallado para dar un poco de variablilidad a los burritos y listo. Todo al centro y que cada uno se lo prepare a su gusto.

jueves, 12 de marzo de 2020

Khoresh Gheymeh (Estofado Persa de Ternera)


En plena crisis del coronavirus os escribo para compartiros una receta que quedó pendiente la semana pasada. A lo mejor no es la época más idónea para prepararlo porque la temperatura ya ha empezado a subir y la gente anda histérica comprando papel higiénico como si no hubiera un mañana. Si alguien me lo puede explicar, por favor se admiten teorías! Escapa a mi entendimiento por completo la obsesión por acaparar paquetes y paquetes de papel. ¿Le entra cagalera a la gente por quedarse en casa? ¿El agua y el jabón ya no limpian? Un poco de sentido común, por favor. Que en estas épocas difíciles de miedos exarcebados por las redes sociales la gente se vuelve muy loca. Esta mañana he ido al Mercadona a por los ingredientes para un Tiramisú y he alucinado. Como si estuviéramos en plena apocalipsis zombie y el mundo acabara mañana. a una hora de la apertura ya no quedaba de nada, palés vacios por toda la tienda! No va a faltar el suministro, los camiones de reposición llegan todos los días de manera normal, por favor, el desabastecimiento lo creais vosotros mismos comprando como para una guerra nuclear.
Sentido común ante todo!
Sigo con lo que iba diciendo...
Recordaréis que la semana pasada publiqué la receta del Advieh, la mezcla de especias persa por excelencia. Hoy os traigo una receta dónde utilizarla. Un guisado de carne de ternera aromático y espectacular que os transportará al mundo de Sherezade solo con cerrar los ojos y saborear una cucharada.
Un plato contundente, para días de frío, este guisado de carne y legumbres se acompaña de arroz y patatas fritas. Toda una bomba de relojería. Pero vale la pena. Sabroso, espeso, aromático... Es todo lo que uno quiere en invierno, esas recetas que a la primera cucharada te calientan el alma y te reconfortan por completo...


jueves, 5 de marzo de 2020

Advieh (la mezcla de especias Persa)


Hoy vamos con una de especias, que ya hacía tiempo que no publicaba ninguna mezcla de esas que alegran el alma y la pituitaria. Y para ello viajamos a la antigua Persia, ahora Irán, y recuperamos esta mezcla de especias que ellos utilizan para arroces y guisos de carne. 
Dicen que hay que preparar la mezcla y dejarla reposar una semana antes de utilizarla para que los sabores asienten y se desarrollen matices que recién preparada no tendría. No se hasta que punto es real, pero yo he sido obediente. Preparé la mezcla la semana pasada y ayer la utilicé en un guisado persa absolutamente delicioso que la semana que viene compartiré con vosotros.
Abrir el frasco es transportarte automáticamente al mundo de las mil y una noches, no me cuesta nada imaginar a Sherezade deleitándose con un arroz aderezado con esta mezcla o cualquiera de sus guardias con la cimitarra colgada del cinto, disfrutando de un plato hasta arriba de Koresh Gheimeh (estofado de carne persa). Os prometo que es embriagador, con esos toques de canela, cardamomo y rosas...

lunes, 2 de marzo de 2020

Pollo Mariposa con Hibisco y Romero y Baby Hasselbacks


El pollo al horno es ese plato que nunca cansa, que siempre queda bien y con el que puedes alimentar multitudes sin casi trabajo. Ayer Domingo venían mis suegros a comer y el plato obligatorio era pollo al horno. Mi suegro es un poco especial para comer y no puedes innovar en términos de especias y sabores. La última vez ya hice un sencillo pollo al limón de esos en bolsa de asar con un limón dentro. Ayer el cuerpo me pedía algo diferente, aunque fuera un poco. Me decidí por un pollo mariposa con limón y hierbas, pero con matices extranjeros. 
El pollo mariposa es un pollo que se ha abierto en canal por la espalda para después retirarle el espinazo y aplanarlo de manera que las pechugas y los cuartos traseros queden al mismo nivel. Esto ayuda a que todo se cocine de forma más equitativa y evitamos que la pechuga quede seca. Además de reducir el tiempo de cocción.
Llevaba yo la idea de comprarlo en Mercadona, pues creía haberlo visto en el lineal. Pollo para barbacoa, abierto. Y cuando llego a las neveras y lo miro. De chiste! Está cortado al revés, en vez de abrir el pollo por la espalda y retirar el espinazo, esta cortado por en medio de las pechugas dejando los lomos al aire de manera que, lo cocines como lo cocines, se van a secar más fácilmente. De la otra manera la pechuga queda recogida en medio, entre las patas y sin un trozo abierto lateral por el que perder la jugosidad. En fin, un despropósito. Cogí un pollo entero y lo hice en casa, que es muy fácil!
Mirando recetas se me ocurrió utilizar el hibisco, que es en cierta manera ácido, recuerda un poco al sumac, así que para acompañar al limón y las hierbas no podía ir mal. Y como grasa principal el ghee, esa joya dorada de aroma embriagador que me tiene completamente cautivada... Vamos con la receta!