Ingredientes (para 16 galletas):
- 110g de mantequilla en punto pomada
- 200g de azúcar rubio claro (yo puse 100g de moreno y 100g de blanco)
- 1 huevo mediano
- 1 vaina de vainilla o unas gotas de esencia
- 165g de harina normal de trigo
- 1 pizca de sal
- 2g de impulsor (Royal)
- 2g de bicarbonato
- 30g de cacao en polvo
- 200g de chips de chocolate
Preparación:
Tamizar la harina con el cacao, el impulsor el bicarbonato y la sal.
Batir la mantequilla hasta alcanzar el punto de pomada. Añadir el azúcar y la vainilla y seguir batiendo hasta que esté cremoso. Añadir el huevo y seguir mezclando. Cuando esté bien integrado añadir la harina tamizada y mezclar hasta que todo esté homogéneo. Añadir las pepitas de chocolate y darle un par de vueltas más.
Precalentar el horno arriba y abajo a 190º.
Mientras, refrigerar la masa mínimo media hora antes de hornear. Esto es imprescindible para que las galletas queden con el grosor adecuado y no se desparramen en el horno.
Formar bolitas de unos 44g y poner en la bandeja del horno sobre papel sulfurizado bien separadas.
Hornear alrededor de 12-15 minutos, (dependerá del horno), hasta que la superficie se haya agrietado y esten muy blanditas.
Sacar del horno y dejar reposar en la bandeja 5 minutos. Pasarlas a una rejilla y dejarlas enfriar del todo para que adquieran esa consistencia crujiente tan rica. Se conservan muy bien guardadas en una lata durante varios días.
Para desayunar, merendar o picar entre horas... simplemente deliciosas!!
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